El mundo de la industria está progresando con mucha rapidez. Cada vez los procesos están más optimizados, y la fabricación ya no solamente incide en la funcionalidad del producto, sino también en el diseño final. ¿Se trata tan solo de una cuestión estética o hay otros beneficios en la calidad del producto gracias a la pintura industrial? Continúa leyendo este artículo para conocer la respuesta.
Últimamente han cambiado las tendencias en el sector industrial. Mientras que en el pasado se intentaban esconder siempre las piezas o los mecanismos de cualquier aparato, ahora muchos diseñadores apuestan por modelos sin recubrimientos o carcasas. Esto repercute directamente en la importancia de la estética de la pieza, ya que pasará a ser un elemento visible en muchas ocasiones. Por eso, la pintura juega un papel clave, pudiendo camuflar o resaltar la pieza gracias a la transformación en el color.
Y no solamente eso, también mejora el acabado superficial, permitiendo que la pieza sea lisa, sin poros y homogénea, lo que facilita su manipulación. Además, puede tener un aspecto brillante o mate, según el proyecto planteado.
Pero, ¿y si te dijera que también hay ventajas en la durabilidad de la pieza gracias a la pintura? Por mucho que pueda sorprenderte, este acabado contribuye a su resistencia y la protege de factores externos como químicos o condiciones ambientales adversas.
Desde Dionisio Bonet, queremos expresarte que estaremos encantados de colaborar con tu negocio y aportar soluciones personalizadas a tus proyectos. Como especialistas en pintura industrial, entendemos que muchos fabricantes de piezas, especialmente del sector metalúrgico, incluyen de forma habitual en su proceso otros acabados en la pieza tales como el granallado o la cataforesis. Igualmente, en Dionisio Bonet te frecemos esos servicios para tu tranquilidad.
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